sábado, 26 de marzo de 2011

El dia que te fuiste

Hoy hace 6 meses de tu partida, 6 meses de tu ausencia.
De casa vacía, sin tu olor, sin tu risa, sin tu presencia.
Hoy recuerdo el día que te fuiste a las 7 y media de la mañana,
después de haberte sostenido la mano durante toda la noche,
decidiste marcharte y abandonar tu dolor, 
cerrar tu herida definitivamente.

Tantas cosas han pasado desde entonces...
demasiados cambios en mi vida.
Contarte que sigo luchando, como tu me ensañaste.
Que todos los días intento mejorar y superarme.
Pero que esto es difícil,
ya no te tengo aquí para aconsejarme.

Cada día me levanto y me acuerdo de ti.
Los desayunos, las comidas juntas
y sobre todo tu ayuda y tu soporte.
Se que desde donde estés, me estás ayudando.
Que tu sonrisa me acompaña allá donde voy.
Que todo lo que eras está en mi.

Pero lo único que verdaderamente se
es que un día volveremos a reencontrarnos.
Tu risa volveré a oír y tu piel a acariciar,
tu olor volverá a empapar mis sentidos
y tu voz volverá a decirme como solía decir 
todos los viernes al rencontrarnos
"Hola carinyo!" con ese tono tan alegre.

Y como hace 6 meses,
hoy vuelve a lucir el sol en el cielo,
parece que con esto me quieres decir
que sea feliz y que no te llore más.

miércoles, 23 de marzo de 2011

Energía

¿Qué es la energía? Podemos definirla de mil maneras.

Según el diccionario de lengua castellana que tengo en mi haber la define como "Fuerza", "Fuerza de voluntad", "Capacidad de los cuerpos para producir un trabajo en forma de movimiento, luz, calor, etc". Y es sinónimo de "Eficacia, poder, vigor, empuje, tesón, nervio". Por tanto, la energía se puede ver desde dos puntos de vista, el relativo al individuo, a sus ganas de avanzar y otro a la capacidad de producir luz, movimiento, etc.

Bueno, después de esta aclaración semántica, me gustaría centrarme en el significado de energía que a mi personalmente me interesa y que no es más que el del empuje de las personas como individuos a mejorar, a tener voluntad.

Energía es la fuerza de voluntad, que no es más que el poder que nosotros mismos creamos. Poder entendido como a la capacidad de obrar, a la capacidad que tenemos de elegir. Porque yo entiendo la energía como las ganas de hacer, la voluntad, el poder que tenemos de levantarnos por la mañana y decidir que "HOY VA A SER UN GRAN DÍA".

Energía es la fuerza de voluntad, el cambio y el tesón que tenemos cada uno dentro de nosotros. Nuestras ganas de decir que todos nuestros problemas, que todos nuestros pensamientos que no nos dejan dormir, nuestros miedos son algo que no queremos, que no deseamos y que realmente vamos a hacer, no, mejor dicho, estamos haciendo algo para cambiarlo. Eso es la energía para mi. El empuje y las ganas de cambio y de liderar nuestra vida, nuestro camino.

Sinceramente creo que cada uno en nuestro interior sabe lo que realmente quiere y lo que puede llegar a ser y conseguir, aunque muchas veces nos falte "energía" para realizarlo. Entonces es cuando tenemos que pensar en crear esa sensación de poder y dejar atrás todo lo que nos bloquea. Porque si nosotros no confiamos en nosotros mismos nadie lo hará y no demostraremos ni a los otros ni a nosotros mismos lo que somos capaces de lograr. Muchas veces nos sorprendemos cuando vemos de lo que somos capaces, sobretodo en situaciones limite, cuando no estamos cómodos y sacamos tod@ nuestr@ energía/poder/tesón/eficacia/vigor.

Así que cada mañana al levantarnos podríamos pensar en que somos nosotros los que creamos las circunstancias que nos acaecen a lo largo del día, y lo aclaro. Nosotros no dominamos lo que nos pueda pasar pero si que tenemos la capacidad/voluntad de reaccionar ante cualquier acontecimiento de una forma u otra, somos capaces de utilizar y crear una energía positivo o negativa, así que cuestionemos que es lo que deseamos realmente. Eso es lo que nos hace mejorar.

En todo momento podemos elegir y crear una energía que nos ayude, no una que nos destruya.

Hasta la próxima entrada.

lunes, 14 de marzo de 2011

Cáncer II

Gracias a un amigo que colgó un enlace en Facebook sobre una notícia de un periódico regional donde se habla de la reacción de los enfermos oncológicos, mis sentimientos se removieron otra vez. Casi no pude terminar de leerlo ya que las lágrimas que broyaban de mis ojos me lo impedían. Los recuerdos invadían mi mente, las palabras que me dijeron por última, últimisima vez no me dejaban huir de este torrente de sentimientos.

Después de intentar vencer, o mejor dicho, dejar salir todo este dolor, me di cuenta de que este articulo merece la pena ser compartido. Una gran reflexión se asoma con la lectura de las experiencias de toda esta gente que ha padecido o padece cáncer. Merece la pena que leais el siguiente enlace:

Algunos puntos que me hacen pensar son: 
  • La poca capacidad que tenemos de imaginar que la muerte nos espera, que hay un día que nos tocará a nosotros y seguramente no en el momento que imaginabamos.
  • La gran capacidad que tenemos para afrontar los momentos más duros de nuestra vida, como lo es, el diagnóstico de una enfermedad que se encuentra en fase muy avanzada.
  • La reflexión que hace el psicólogo, con el que estoy totalmente de acuerdo, que cada uno muere a su estilo, de su manera.
  • Que somos más intuitivos de lo que imaginamos. Sabemos cuando algo no va bien, cuando nos ha tocado a nosotros.
  • Y la reacción de la mayoría de los que están en una etapa de su vida muy distinta a la anterior, su última etapa. En esta etapa casi siempre piensan, matizando, creo que piensan, más en los que se quedan, en la familia, en los amigos, en los seres queridos. No quieren que suframos, no les gusta vernos padecer y muchas veces lo que nos dicen es muy difícil de asumir y digerir, pero hay que escucharles aunque muchas veces esto nos supere.

A todos aquellos que día tras día luchan por vencer o sobrevivir de una forma digna el tiempo que el cáncer les conceda.

Hasta la próxima entrada.

sábado, 12 de marzo de 2011

Echar de menos

¿Cúanto se puede echar de menos a una persona? 
Estar esperando a que entre por la puerta, pero saber que nunca regresará, que tras esa puerta nunca aparecerá la persona a la que tanto se añora. Que no será abierta por ella...

¿Cuántos días nos preguntaremos por qué?
El por qué la muerte hizo acto de presencia en mi hogar y en el de mucha otra gente, cuando no había sido invitada, cuando no estábamos preparados para su visita.

¿Cuándo terminarán las preguntas?
Cada día, cada hora, cada momento en el que las preguntas hacen acto de presencia, deseo encontrar respuesta, deseo aliviar esta carga, dar sentido a lo sucedido. Resolver el misterio del por qué a ella, por qué a nosotros.

¿Cuándo asumiremos que el cambio ya ha sucedido?
No nos amoldamos a la nueva situación, al nuevo escenario que nos ha sido dado, con nuevas responsabilidades y con sueños rotos, o al menos, por el momento aparcados hasta que estemos preparados para volver a reemprenderlos.

¿Cuándo entenderemos... que sólo nos queda resignación ante la muerte?
Por que la muerte no la podemos elegir, ni de que manera ni en que momento ni en que lugar... Que los que ya no están no volverán. Que no por más esperar dará resultado diferente y que ante este panorama no queda otra salida que resignarse a los hechos e intentar sacarles el lado positivo. Puede que la pérdida de un ser querido nos ayude a crecer como personas, a afrontar los nuevos retos desde otra perspectiva y que este haya sido el último regalo, en forma de aprendizaje/consejo, que nuestro ser querido nos haya querido regalar.

Hasta la próxima entrada

lunes, 7 de marzo de 2011

El tiempo en las redes sociales

El tiempo en las redes sociales e Internet en general. Bueno este tema no es nuevo para nadie, pero me gustaría hacer una auto-reflexión del tiempo que pasamos en Internet consultando las redes sociales y demás.

Si uno se fija pasamos tanto tiempo delante de una pantalla (ya sea el ordenador, la tele, el teléfono móvil, etc) que con ese tiempo podríamos hacer cada día lo que de verdad nos motivase.

Me voy a centrar en el ordenador, para acortar el tema. Delante de él nos pasamos 8 horas como mínimo, muchas veces ya por el simple hecho de trabajar (en la mayoría de centros laborales el uso del ordenador para desempeñar la acción laboral es obligatorio, ya sea por que trabajas en una oficina o como cajera de una tienda de ropa, el uso de éste es imprescindible) o por el hecho de estudiar (cuántos hacemos nuestros apuntes a través de esta herramienta o ya están en un aula virtual y necesitamos conectarnos a Internet para hacer uso de ellos?). Pero lo peor, o lo impresionante es que después (incluso mientras) de trabajar o estudiar aún nos pasamos unas horas más delante de él!!!

El ordenador, bueno mejor dicho, Internet acaba siendo nuestra "esclavitud". Si, se que es un poco fuerte decir esto, pero si lo pensamos fríamente pasamos muchas horas haciendo tonterías en Internet. Por ejemplo frases como: "Tengo que mirar si tengo un e-mail de Pepito para saber si nos vamos de vacaciones", "Ayer le dejé un comentario en el Facebook a Juan sobre las fotos que colgó el fin de semana, voy a ver si me ha contestado", "Me he creado un perfil en Badoo para conocer gente nueva, y ya por si acaso, ligar", "Tengo un perfil en Linkedin con mi CV, tendré que actualizarlo con nueva información", etc... Joder! Cuantas cosas tenemos que hacer al día en la red! Si acabas hasta las narices de estar sentado todo el día enfrente del ordenador, estudiando o trabajando, y luego somos tontos y nos pasamos unas cuantas horas más perdiendo el tiempo, en vez de aprovecharlo con cosas que realmente nos llenen!

Pero, hay que reconocer que esto nos gusta. Nos atrae estar "socializados" con el resto del mundo y de la forma más fácil y vaga posible, la que está al alcance de nuestros dedos! Si de nuestros dedos, ya no al alcance de la mano, porque con unos pocos toques de dedos en el teclado nos comunicamos con gente que no tenemos cerca o que ni tan siquiera conocemos. Aunque todo esto implica que ya no dedicamos tanto tiempo a "estar en la calle" socializandonos como antes. 

Con esta autoreflexión (ya que pierdo bastante tiempo en redes sociales y demás) espero que algún día en vez de quedarnos en casa a mirar el Facebook, etc nos entren las ganas de llamar a cualquiera de nuestros amigos para ir a tomar una cerveza, por ejemplo.

Hasta la próxima entrada.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Sueños

Que sensación más extraña invade nuestro cuerpo cuando nos levantamos por la mañana y recordamos un sueño o parte de él. Nos decimos a nosotros mismos "Ha sido un sueño" y no le damos mayor importancia, ¿o si? Mucho depende de lo que hayamos soñado...

En los sueños recordamos cosas el pasado, cosas que no tienen sentido para nosotros mismos, nuestros miedos hacen acto de presencia, recordamos a la gente con la que hemos compartido nuestro recorrido por la vida y gente a la que nunca hemos visto.

Pero a veces la memoria nos juega malas pasadas y se representan a través de nuestros sueños. Se producen entonces situaciones que nos ofuscan e invaden nuestra frontera de la compresión. Queremos darle sentido a todo lo que nos rodea, incluidos los sueños, pero esto es una acción verdaderamente imposible, ya que la mente está fuera de nuestro control cuando soñamos. 

Se producen en muchas ocasiones sueños repetitivos, esos que intentas interpretar como premonitorios o de advertencia. ¿Pero qué sucede cuando ese mismo sueño lo sueñan tus amigos, familiares o algún conocido? Un sueño prácticamente idéntico en todos los casos. Es entonces cuando el vello se te eriza... ¿Por qué nos pasará esto? ¿Por qué no puedo entenderlo? ¿Qué hay detrás de éste  sueño? No lo logro ni lograré entender.

¿Y qué sucede cuando la nostalgia nos invade? Que empezamos a soñar a los que echamos de menos, los lugares en los que vivimos, o las situaciones que amábamos. En ese momento se te abre la herida que intentas cerrar todos los días, la herida que está curándose y que no desaparecerá nunca porque como buena herida tiene que dejar cicatriz.

Y como ya es hora de soñar, os dejo y me voy a soñar, para poder así después contar y disfrutar de la vida del subconsciente.

Hasta la próxima entrada.